Eficiencia energética: evita el consumo vampiro

Cuando hablamos de eficiencia energética lo primero que se nos pasa por la mente es evitar el consumo vampiro: este término es coloquialmente utilizado para describir la energía que se desperdicia al interior de los hogares, oficinas o empresas. 

¿Ha dejado el cargador del celular enchufado después de cargar su dispositivo? Como este, hay muchos aparatos que continúan consumiendo electricidad, aunque usted no lo sepa.  Esta es la razón por la que las cuentas de luz consumen en demasía los recursos de tu bolsillo. 

Junto con reducir el uso de algunos electrodomésticos, también existe otra alternativa para cuando estos aparatos no estén siendo utilizados, logrando disminuir el "consumo vampiro". Te lo contamos a continuación.

¿Qué es el "consumo vampiro"?

Se trata de un fenómeno que, sin dudas, debe ocurrir en la mayoría de los hogares de nuestro país, seguramente por desconocimiento de las familias o poca precaución.

En Julio de 2022 el Ministerio de Energía de Chile publicó una guía explicando que el "consumo vampiro" es un gasto eléctrico "generado por artefactos que, encontrándose apagados, siguen enchufados y consumiendo energía".

Según cálculos del organismo, hay casos en que el también denominado "consumo en espera" alcanza más de un 9% de una cuenta eléctrica promedio. Por ejemplo, si una familia paga $20.000 de luz, evitando el "consumo vampiro" se ahorrará aproximadamente $1.800.

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Enemigos de la eficiencia energética

Los televisores, decodificadores, consolas de videojuegos, computadores y cargadores de celular enchufados pueden seguir consumiendo energía al encontrarse en suspensión, ya que mantienen energizados sus circuitos internos para estar disponibles para su uso. También existen otros artefactos del hogar que tienen un alto consumo de energía como lavadoras, portones eléctricos, microondas, hornos y encimeras eléctricas.

Te invitamos a descubrir cuáles son los electrodomésticos que se encuentran en tu hogar que consumen más y a partir de eso, aprende a administrarlos.

Algunos ejemplos:

• Termo eléctrico y microondas: ambos se deben mantener apagados durante el día y es preferible prenderlo solo antes de utilizarlos.
• Computadora de mesa: cuando no se usa por un momento, lo mejor es apagar el monitor. 
• Cargadores: es importante desenchufar el cargador del celular o laptop una vez que culmine la carga.
• Televisores y equipos de sonido: lo mejor es no utilizar el televisor o el equipo de sonido para conciliar el sueño, sino disponerse a dormir con todo previamente desenchufado.

Alternativas para ahorrar energía cuando el televisor está encendido 

• Disminuir el brillo del televisor al activar la opción de ahorro de energía de este, los cuales bajan la iluminación.
• Si no puedes dormir sin ayuda del televisor prendido, una opción es programarlo para que este tenga un apagado automático.para así ahorrar la energía y equivale a más dinero.

Eficiencia energética: recomendaciones

• Emplear focos ahorradores o LED en vez de los focos incandescentes.
• Aprovechar la luz natural.
• Evitar planchar de noche, ya que al consumo de la plancha se suma al del foco (para iluminar la habitación). 
• No usar la planta para intentar secar la ropa.
• No abrir el refrigerador innecesariamente. 
• Revisar que las tiras de sellado de la puerta del refrigerador estén en buen estado.
• Al momento de adquirir un nuevo electrodoméstico, busca los de mayor eficiencia energética, también conocidos como categoría A.
• Utiliza multicontactos (barras de supresión de picos) con interruptores para poder apagar los equipos que no se usen de manera continua.
• Un dato práctico, es instalar burletes o sellos térmicos en puertas y ventanas para mantener el entorno temperado durante más tiempo y así ahorrar en el uso de energía.

Profesionales de la INACAP, informan que es perfectamente posible bajar el consumo en el hogar con pequeñas medidas. En el caso de la calefacción eléctrica, prefieren propiciar equipos coherentes con los espacios, evitar temperaturas de seteo sobre los 24 grados, aprovechar momentos de menor uso para ventilar, abrir cortinas de día para que la radiación solar ingrese. 

En un contexto de crisis climática y apremios de la economía doméstica, se creó el límite de invierno.

¿Qué es ‘el límite de invierno’?

El llamado Límite de Invierno es definido como el monto en dinero hasta donde se factura una tarifa de energía base o tarifa normal. Sobre ese límite la empresa puede cobrar un recargo adicional. Se aplica a las tarifas BT1A (principalmente clientes residenciales) y TRAT1 y en hora punta, es decir entre las 18 y 23 horas.

Este impuesto existe en Chile desde 1983, con la puesta en vigencia de la Ley General de Servicios Eléctricos, y cobra una tarifa más alta por un mayor consumo eléctrico, con el objetivo de regular el consumo de electricidad en los meses de invierno; de abril a septiembre. 

El cálculo del límite de invierno, que no se actualiza hace trece años, es el mayor valor entre el promedio de consumo del periodo de verano (octubre del año previo a marzo del año en curso), incrementado en 20% y 350 kWh. Además, el cobro del «límite de invierno» se activa una vez sobrepasados los 430 kWh/mes.

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